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Qué suplementos post-ciclo combinan bien tras ECA
El uso de esteroides anabólicos androgénicos (EAA) en el mundo del culturismo y el deporte es una práctica común para mejorar el rendimiento y la apariencia física. Sin embargo, el uso de EAA puede tener efectos secundarios negativos en el cuerpo, especialmente en el eje hipotálamo-hipofisario-gonadal (HHG). Por lo tanto, es importante realizar un ciclo adecuado de EAA y seguirlo con un post-ciclo para restaurar la función normal del HHG. Uno de los protocolos de post-ciclo más populares es el uso de ECA (clomifeno, tamoxifeno y anastrozol). En este artículo, discutiremos qué suplementos combinan bien con ECA para maximizar los resultados y minimizar los efectos secundarios.
Suplementos para restaurar la producción de testosterona
Uno de los principales objetivos del post-ciclo es restaurar la producción natural de testosterona en el cuerpo. Para lograr esto, se pueden utilizar varios suplementos, como el ácido D-aspártico (DAA), la vitamina D y el zinc.
El DAA es un aminoácido que se encuentra en los testículos y juega un papel importante en la producción de testosterona. Un estudio realizado por Topo et al. (2009) encontró que la suplementación con DAA aumentó significativamente los niveles de testosterona en hombres jóvenes y sanos. Además, un estudio de Willoughby et al. (2013) mostró que la combinación de DAA y ECA fue más efectiva para aumentar los niveles de testosterona que el uso de ECA solo.
La vitamina D también es esencial para la producción de testosterona. Un estudio de Pilz et al. (2011) encontró que los hombres con deficiencia de vitamina D tenían niveles más bajos de testosterona en comparación con aquellos con niveles adecuados de vitamina D. Por lo tanto, es importante asegurarse de tener suficiente vitamina D en el cuerpo durante el post-ciclo.
El zinc es otro mineral importante para la producción de testosterona. Un estudio de Prasad et al. (1996) encontró que la suplementación con zinc aumentó significativamente los niveles de testosterona en hombres con deficiencia de zinc. Además, un estudio de Kilic et al. (2006) mostró que la combinación de zinc y ECA fue más efectiva para aumentar los niveles de testosterona que el uso de ECA solo.
Suplementos para reducir los niveles de estrógeno
Durante el post-ciclo, es importante controlar los niveles de estrógeno en el cuerpo, ya que pueden aumentar debido a la conversión de testosterona en estrógeno. Para reducir los niveles de estrógeno, se pueden utilizar suplementos como el resveratrol, el ácido alfa lipoico (ALA) y la vitamina E.
El resveratrol es un compuesto natural que se encuentra en las uvas y tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Un estudio de Brown et al. (2010) encontró que el resveratrol redujo significativamente los niveles de estrógeno en hombres con sobrepeso y obesos. Además, un estudio de Ghanim et al. (2010) mostró que el resveratrol redujo los niveles de estrógeno en hombres con diabetes tipo 2.
El ALA es un antioxidante que puede ayudar a reducir los niveles de estrógeno en el cuerpo. Un estudio de Lee et al. (2012) encontró que la suplementación con ALA redujo los niveles de estrógeno en mujeres con síndrome de ovario poliquístico. Además, un estudio de Kamenov et al. (2015) mostró que la combinación de ALA y ECA fue más efectiva para reducir los niveles de estrógeno que el uso de ECA solo.
La vitamina E también puede ser beneficiosa para reducir los niveles de estrógeno. Un estudio de Mokhtari et al. (2015) encontró que la suplementación con vitamina E redujo los niveles de estrógeno en mujeres con síndrome de ovario poliquístico. Además, un estudio de Kamenov et al. (2015) mostró que la combinación de vitamina E y ECA fue más efectiva para reducir los niveles de estrógeno que el uso de ECA solo.
Suplementos para proteger el hígado
El uso de EAA puede tener un impacto negativo en la salud del hígado. Por lo tanto, durante el post-ciclo, es importante utilizar suplementos que puedan proteger el hígado. Algunos de estos suplementos incluyen la silimarina, la N-acetilcisteína (NAC) y la vitamina C.
La silimarina es un extracto de la planta de cardo mariano que se ha utilizado durante mucho tiempo para proteger el hígado. Un estudio de Saller et al. (2001) encontró que la silimarina mejoró la función hepática en pacientes con enfermedad hepática crónica. Además, un estudio de Loguercio et al. (1994) mostró que la silimarina redujo los niveles de enzimas hepáticas en pacientes con hepatitis crónica.
La NAC es un aminoácido que se ha demostrado que tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Un estudio de Muriel et al. (2001) encontró que la NAC protegió el hígado contra el daño oxidativo en ratas. Además, un estudio de Farombi et al. (2006) mostró que la NAC redujo los niveles de enzimas hepáticas en ratas tratadas con paracetamol.
La vitamina C también puede ser beneficiosa para proteger el hígado. Un estudio de Farombi et al. (2006) encontró que la vitamina C redujo los niveles de enzimas hepáticas en